No nos quedemos de brazos cruzados.
Agrupación “Rojo y Negro. 1° de mayo”
A esta altura de nuestra historia como pueblo, resulta inaceptable que el resultado de una elección que se desarrolló con normalidad, sea utilizado para arrojar sobre las espaldas de los trabajadores una nueva crisis económica y, encima, una de tamañas dimensiones.
Las medidas informadas el miércoles por el gobierno nacional son absolutamente insuficientes para atender el daño que la devaluación ya empieza a producir en el maltratado bolsillo de los trabajadores. Es más grave aún que el anuncio tenga un propósito estrictamente electoral, si no lo es sólo propagandístico. De todas ellas, el pago de un bono en negro es otra cachetada a los trabajadores, es una medida inaceptable y extorsiva que vulnera nuestros derechos y contradice nuestras reivindicaciones históricas.
En cuanto al gobierno provincial, es clave señalar que esta situación vuelve viejo el ya desactualizado acuerdo paritario sobre salario docente. La “cláusula gatillo” allí estipulada (calculada a partir del insuficiente índice de precios del INDEC de Macri y sin un ajuste “acumulativo”, sino medido en relación al salario de diciembre), agrava aún más sus debilidades en este contexto. Esta devaluación acelera aún más el proceso inflacionario, alejando los precios más rápidamente de nuestros salarios y ahondando esa brecha.
En concreto: los docentes entrerrianos no podemos esperar a octubre para que nuestro salario recupere la inflación que estamos padeciendo hoy, sería catastrófico.
Los trabajadores de la educación debemos convocarnos inmediatamente, a través de un Plenario de Secretario Generales, que tome definiciones ante esta coyuntura; no podemos seguir viendo cómo pasan las cosas, cómo nuestros derechos son pisoteados y cómo las patronales aprovechan la crisis para aplicar medidas más convenientes a sus intereses que a los del pueblos.
Agrupación “Rojo y Negro. 1° de mayo”