Minoría “Rojo y Negro. 1º de mayo” en CDC de AGMER.
Los docentes entrerrianos estamos viviendo uno de los
momentos más críticos de nuestra historia como colectivo de trabajadores. A la
sordera del gobierno en cuanto a nuestros reclamos por condiciones dignas para
enseñar y aprender en aspectos centrales como infraestructura, comedores,
condiciones sanitarias, transporte, estabilidad, salario, entre muchos, debemos
sumar la deliberada no remuneración del FONID y una avanzada directa, grosera e
inaceptable sobre nuestro derecho a la huelga, a través del Defensor General de
Menores y de la justicia.
El fallo del juez Pablo Barbirotto que elimina el derecho a
huelga, publicado en la tarde del jueves 30 de julio, es un paso más de esta
lamentable avanzada del gobierno y la justicia sobre los trabajadores de la
educación.
El juez Barbirotto –cuyos ingresos equivalen a diez salarios
mínimos docentes y están exentos de tributar el “Impuesto a las ganancias” que
pagamos trabajadores con ingresos mucho menores– antes de ordenarnos que
sigamos reclamando salario sin dejar de enseñar, debe saber dos cosas:
En primer lugar, que es ilegítima su pretensión de conducir
al colectivo docente y la de gobernar nuestro sindicato, violando derechos
constitucionales de los trabajadores conquistados a fuerza de décadas de lucha.
En segundo lugar, debe tener en claro que los docentes
reclamamos salario sin dejar de enseñar, pues enseñamos luchando. Enseñamos
sobre los abusos de poder, las contradicciones del sistema, sobre cuánto cuesta
vivir y qué valor tiene nuestro salario, sobre las traiciones, las chicanas
judiciales, las operaciones mediáticas, las falencias, las complicidades, etc.
Y lo seguiremos haciendo, porque este fallo nos brinda más materia para ello.
Felicitamos a la docencia entrerriana que salió a la calle.
Convocamos a repudiar y rechazar esta avanzada inédita e inaceptable sobre
nuestro constitucional derecho a huelga profundizando la lucha, redoblando la
apuesta y sosteniendo nuestro rol como sujetos políticos ante estos atropellos
tan irreparables como improvisados que dirige el poder de turno hacia nosotros,
los trabajadores de la educación.
Adriana Dechat
Actas y Administración AGMER CDC
César Pibernus
Organización AGMER CDC
Alejandra Gervasoni
Jubilados AGMER CDC
Álvaro Escobar
Vocal AGMER CDC